Hoy, 19 de octubre, se celebra el Día Mundial contra el Cáncer de Mama. En manos de todos está el que no se quede en una anécdota más, en una conmemoración en la que cuatro sacan beneficio pero no se ayuda realmente a las pacientes. Porque podríamos proponernos objetivos más pegados a la realidad, y no tanta "carrera solidaria" o tanta campaña publicitaria obteniendo "minutos de investigación" frente al cáncer de mama.
¿Acaso es tan difícil facilitar y abaratar los trámites para que la investigación académica (en este y en otros campos) no sea tan dependiente de la financiación de la industria farmacéutica? Es muy fácil culpar a esta industria, pero lo cierto es que desde "los que mandan" no existe una sola iniciativa que facilite la investigación libre ni el desarrollo de proyectos de calidad.
Así mismo, tampoco se nos puede llenar la boca con los conceptos de "atención integral" al paciente, y luego tener contratados a becarios en condiciones leoninas para, por ejemplo, ofrecer apoyo psicológico o nutricional a los pacientes. La solución no es el voluntariado; estos becarios son profesionales formados en su campo, realizan un trabajo muy importante y por lo tanto merecen una retribución justa por ello. Pero claro, es más sencillo apelar al espíritu del voluntariado para "cubrir huecos" y ahorrarse unos eurillos, ¿verdad?
En resumen, menos contar milongas a las pacientes, y más preocuparse realmente porque la atención que se las brinda sea la mejor posible. Y ello no consiste sólo en ver pacientes "a cascoporro", la atención de excelencia consiste en algo más.
Totalmente de acuerdo.
ResponderEliminarSaludos