lunes, 28 de febrero de 2011

Profesión de alto riesgo

Otra agresión "mediática" más, la del energúmeno que se lió a hachazos con el personal de un centro de salud de Fuenlabrada. Más espectacular que el resto, y con consecuencias mucho más funestas. Pero no olvidemos que el personal sanitario está expuesto a un continuo goteo de amenazas, agresiones verbales, presiones "poco sutiles" por parte de pacientes y familiares y, en casos más extremos como éste, agresiones físicas que pueden llegar a amenazar la vida.
Para que luego haya personajes que justifiquen estos arrebatos en el contexto de que "todo funciona muy mal", "hay que esperar mucho", "es que el médico no tiene ni idea" (según su excelso criterio que no precisa de una carrera de Medicina) y otras perlas varias.
Reconozcámoslo, por muy penoso que sea; a día de hoy, la nuestra es una profesión de alto riesgo. Y si no hay firmeza por parte de las autoridades a la hora de condenar estos hechos, dará la sensación de que "todo vale", de que "no pasa nada, es un hecho aislado", y las cosas seguirán por los mismos derroteros. ¿Es eso lo que queremos?

viernes, 25 de febrero de 2011

¿Quieres investigar? Pues vete

Es un tema recurrente en este blog, que ahora se ha merecido un reportaje el ElMundo.es. La dificultad para investigar en este país es tan inmensa que muchos grandes científicos han emigrado, o se han labrado una carrera de éxito, más allá de nuestras fronteras. Esto debe saltar a la opinión pública; no es lógico que todos los recursos empleados en la formación de este personal altamente cualificado se evaporen y repercutan en beneficios en los otros países que los acogen. Y no digo que no se puedan ir, todo lo contrario, alabo su valentía y su coraje. Dejarlo todo atrás tiene un mérito increíble, y dado que no son valorados en España, tendrán que buscarse un futuro en otro sitio.
Lo dicho, una lectura muy recomendable que nos asoma a la realidad de la ciencia en España. Anda que tener un Ministerio específico para esto...

lunes, 14 de febrero de 2011

Más que interesante reflexión de Albert Jovell

Albert Jovell, del Foro Español de Pacientes, hace una reflexión muy recomendable en Diario Médico sobre la crisis y sus repercusiones sobre el sistema sanitario, que me permito reproducir en este post. Insisto, una lectura más que aprovechable.

"En la actual situación de crisis económica se ha iniciado un discurso sobre la necesidad de recortar los presupuestos sanitarios. Es éste un discurso peligroso, más propio de ignorantes que de conocedores del sistema, si no se acompaña de matizaciones. En primer lugar, se tendría que explicitar si los recortes supondrán un racionamiento en la calidad asistencial que afecte a algo tan valioso como tener un acceso equitativo a la excelencia médica. Cabría determinar qué no se va a cubrir en la póliza de seguro público y en base a qué criterios. En segundo lugar, habrá que preguntarse si se va a frenar la introducción de innovaciones que aportan valor terapéutico. Sin responder a estas matizaciones podemos convertir uno de los mayores logros del progreso social -un acceso equitativo a un sanidad de calidad sin discriminación socioeconómica- en un elemento de regresión social, lo cual es inaceptable moral y socialmente.
La crisis que padece la sanidad es de éxito, no de fracaso como ocurre en otros sectores y profesiones. ¿Ha evolucionado la justicia, la economía, la educación o la política tanto en los últimos 30 años como la sanidad? Si hubieran evolucionado tanto, seguro que nos habríamos ahorrado la coyuntura económica actual. No cabe duda de que la actual crisis no la ha generado el sector sanitario y, por lo tanto, no debe pagar sus consecuencias. La crisis debe pagarla quien la genera y quien no sabe prevenirla. Es una cuestión de justicia. Por otra parte, en este intento desesperado de recortar presupuestos, algunos se olvidan de que la sanidad es uno de los escasos sectores capaces de generar valor y, por lo tanto, debe ser considerado objeto de inversión si lo que se pretende es sacar a España del atolladero. Ello no es óbice para que el sistema se plantee con seriedad el establecimiento de una agencia independiente que detecte bolsas de ineficiencia y promueva prácticas coste-efectivas. Una de estas prácticas es la formación de paciente crónicos, que en el Reino Unido ha generado una media de 2.075 euros de ahorro por alumno (ver www.universidadpacientes.org). La solución es innovar, no recortar. Si recortamos no progresamos. Cabría preguntarse si los que han gestionado la sanidad en tiempos de bonanza económica están en condiciones de hacerlo en crisis.
Esfuerzo colectivo
El gran éxito de la sanidad en España es producto de un esfuerzo colectivo de profesionales, gestores y políticos, además de un compromiso ciudadano. Los políticos deben proteger a los profesionales, que moviéndose en la banda salarial más baja de Europa han aceptado con resignación un injusto recorte salarial. Tampoco es justo que profesionales con tantos méritos sean gobernados por personas ajenas al sector o sin estudios. Eso es una bofetada a la meritocracia y un brindis a la mediocridad. Los profesionales son una especie a proteger que no basan su trabajo en la especulación y en la mentira sino en el compromiso con el paciente y en la búsqueda de la verdad. Hemos de conseguir que se sientan los principales actores del sistema sanitario, porque es lo que realmente son para los pacientes.
Cuando yo estudiaba ciencia política me enseñaron que el Estado tiene el monopolio de la regulación, Max Weber dixit. El incremento de un 20 por ciento del valor de la acción el día que La Caixa anuncia su conversión a banco, el de un 17.65 por ciento de la acción de una compañía alimentaria cuando ficha a un director general de la competencia y los constantes premios a la especulación financiera a corto plazo nos señalan áreas en las que la regulación puede introducir un sistema de taxación especial que cofinancie la sanidad. Hay que tener coraje moral para hacerlo, pero hay que hacerlo por respeto a la democracia.
El discurso actual de que los gobiernos han de rendir explicaciones a los mercados antes que a los ciudadanos deshidrata la democracia y deslegitima a los partidos políticos. En un país con un paro juvenil del 50 por ciento, los gobiernos deben prever que los jóvenes sin futuros conectados vía Facebook y Twitter pueden iniciar una reflexión a la tunecina que ponga en jaque a los partidos políticos actuales por su ineficacia en el ejercicio de la legitimidad democrática. Los pacientes no renunciaremos a los logros conseguidos y a seguir mejorando. Lo hacemos por nosotros y por los que ahora están sanos, porque la enfermedad no la eliges sino que es ella la que te elige. Ser paciente es una mera cuestión de tiempo. Cabría preguntarse si los que han gestionado la sanidad en bonanza están en condiciones de hacerlo en crisis."


jueves, 10 de febrero de 2011

Ya empezó Revisiones en Cáncer 2011


Todo el que esté más o menos metido en el mundo de la Oncología lo conoce: Revisiones en Cáncer es un clásico. Ayer empezó y mañana acaba. Un gran éxito de asistencia, y una reunión muy recomendable, sobre todo para residentes; pero también una buena oportunidad para coincidir con compañeros que hace tiempo que no ves o con los que no coincides desde hace años.

Hay que reconocer que el diseño en forma de Simposios patrocinados por la industria, en vez de sesiones agrupadas por patología, es algo chirriante, ya que no te puedes organizar para ver de una vez todo lo interesante en, por ejemplo, cáncer de pulmón. Y tampoco es que quede demasiado bien que haya ponentes que den dos o tres charlas sobre temas distintos a lo largo de la reunión (como si no hubiera de sobra oncólogos capaces en nuestro país para que siempre hablen/hablemos "los mismos").

Pero, fuera de eso, un clásico que siempre vuelve con fuerza. Muy recomendable, como he dicho antes.

viernes, 4 de febrero de 2011

Dia Mundial del Cáncer: es hora de normalizar


Los que os hayais asomado por este blog de vez en cuando sabreis que no creo mucho en todo el asunto de los días mundiales y demás historias propagandísticas. Pero hoy 4 de febrero es el Día Mundial del Cáncer, y sólo quiero reseñar una iniciativa que me ha parecido muy acertada.

Desde la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) se ha planteado un tema que es recurrente, la ocultación del cáncer y su "mitificación" como algo destructivo y sin solución. Esa cantinela tan vista en los artículos de la prensa de "falleció tras una larga y penosa enfermedad" es algo que me saca de quicio cada vez que lo oigo / leo. Si no se quiere decir que falleció de cáncer, bien por expreso deseo de la familia o bien porque simplemente no se quiere dar esa información, perfecto, pero usar esta frase hecha es ridículo.

Hay que normalizar esta enfermedad, que causa aproximadamente un 25% de los fallecimientos, y que, si separamos las enfermedades cardiacas de las vasculares cerebrales, es la primera causa de muerte. Se estima que en los países desarrollados aproximadamente 1 de cada 3-4 personas presentarán algún tumor maligno a lo largo de su vida. Por lo tanto, con estos datos delante, va siendo hora de que dejamos de actuar como avestruces, escondiendo el problema, y lo aceptemos como una enfermedad más, que es de lo que se trata, ni más ni menos.

Una enfermedad en la que, de modo lento pero seguro, se van haciendo avances y se consigue reducir de forma paulatina la mortalidad. Hablemos sin tapujos sobre ella, destinemos fondos para realizar una investigación de calidad para poder avanzar realmente en su tratamiento, y dejemos de estigmatizar a los pacientes con cáncer a base de eufemismos.