Digan lo que digan "los que mandan", cada vez más personal sanitario coge las maletas y emigra para encontrar unas condiciones de trabajo dignas más allá de nuestras fronteras. En total, se estima que casi 9.000 facultativos formados en España se encuentran trabajando en otro país. ¿Y cuántos han solicitado volver a España, dentro de ese tan publicitado programa de retorno del personal médico? Pues 21, ni más ni menos.
Mientras tanto, hay que reconocer que somos un "coladero" para los médicos extracomunitarios. En ningún otro país se dan tantas facilidades. Así estamos, que casi el 50% de los nuevos médicos residentes son extracomunitarios. No es cuestión de que sean o no extranjeros, simplemente se trata de que resulta un auténtico derroche formar a médicos con los impuestos de todos para que luego tengan que irse a otro país a ejercer y resultar productivos. Es decir, estamos tirando la inversión que supone la formación de estos profesionales a la basura.
Eso sí, relacionado o no con este tema, este año, a diferencia de los anteriores, no han quedado plazas vacantes de residente de Medicina Familiar y Comunitaria. ¿Será debido a la afluencia masiva de opositores MIR extracomunitarios? Me temo que sí.
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